El Showroom «Keller» de Aurora

13. septiembre 2024 | 

Cuando buscas unas almendras y encuentras una persona vitamina

¡Fíjate en esto!

Ayer tuve mi reunión anual con mi amiga Aurora. Sí, tengo una amiga llamada Aurora, igual que el segundo nombre de mi abuela paterna, Ángela Aurora.

El significado de «Aurora» es el amanecer, la salida del sol. En la mitología romana, Aurora era la diosa del amanecer, encargada de abrir cada mañana las puertas del cielo para que el sol pudiera salir. De ahí viene la asociación del nombre con la luz, el comienzo y la renovación diaria.

Un pequeño dato curioso, para que te lleves algo de cultura general. Ya sabes, me encanta que la gente que pasa por aquí aprenda, recuerde o incluso desaprenda algo.

Por otro lado, está la palabra «Keller» en alemán, que significa sótano o bodega en español, se refiere a una habitación subterránea, usada generalmente para almacenar vino. Es una tradición arquitectónica que viene de Europa y que, con el tiempo, se popularizó en Estados Unidos, especialmente entre las clases altas.

Los «Kellers» o bodegas privadas en Hollywood se han convertido en sinónimo de un estilo de vida lujoso. Las celebridades los usan no solo para coleccionar vinos, sino también para crear espacios exclusivos en sus hogares: cines privados, salas de juegos… espacios íntimos y personales.

¿Y qué tiene que ver esto con mi amiga Aurora?

Bueno, Aurora es como esa luz del amanecer: siempre tiene mil ideas y ve soluciones donde otros no las ven. Es empática, inteligente, y sabe cómo hacer que las cosas funcionen.

Te cuento una historia. En pleno 2020, en medio de la pandemia, estaba buscando unas peladillas, almendras o Zuckermandeln (como las llaman en alemán) para la primera comunión de mi hija. Después de buscar y buscar, una señora que iba a hacer la torta me dio el contacto de Aurora. Me dijo que fuera a su showroom.

Ahí voy, emocionada, esperando encontrar una gran tienda repleta de almendras cubiertas de azúcar en todos los colores, con un letrero gigante. Pero pasé frente al edificio como veinte veces sin encontrarla. Finalmente, la llamé y me dijo: «Es el edificio tal». Al fin llegué.

Cuando entro, lo primero que noto es que había encontrado las almendras que llevaba años buscando. ¡Diez años, para ser exacta! Y siempre que las pedía por internet llegaban partidas, nunca intactas. Pero lo más sorprendente no fue eso.

Aurora me recibió muy amablemente y me llevó a su «Keller». Su tienda estaba en su sótano. Lo primero que pensé fue: ¡Qué genia! No paga renta. Y lo segundo fue: esta mujer tiene una visión increíble, porque no usa el sótano para guardar cosas viejas, sino para crear algo extraordinario.

Entré, y me quedé boquiabierta. Le pregunté algo como: «¿Cómo se te ocurrió montar el negocio aquí?». Y su respuesta fue clara: «Yo no guardo nada que no use. Lo dono, lo regalo o lo vendo».

Lo que realmente me asombró fue el negocio que había montado Aurora en su Keller. Ella, apenada porque su tienda estaba en un sótano, cuando en realidad su sótano es un espacio espectacular. Y tener un sótano así no es solo un lujo; es un símbolo de estatus, elegancia y, sobre todo, de cómo aprovechar las oportunidades.

Si lo usas bien, claro. Porque si lo usas para acumular basura… entonces no.

Pensé en todos esos grandes nombres como Steve Jobs, Bill Gates, Jeff Bezos, que empezaron en sus garajes. Pues Aurora tiene su propio sótano, pero es el más estiloso que conozco. Al entrar, sientes que no estás en el país de las maravillas de Alicia, sino en el de Aurora.

No te puedes imaginar el showroom que ha montado allí. Aurora tiene un NBA (sí, de esos que te enseñan a hacer negocios), y cada vez que hablo con ella, aprendo algo nuevo.

Y no, esto no es publicidad. Ella no me ha pagado ni un centavo por escribir esto. Simplemente tuve la suerte de sentarme a charlar con ella y, con una copa en la mano, ver la luz. Aurora es una de esas personas que iluminan tu vida, es una persona vitamina.

Justo ayer hablábamos de que nunca hay excusas para empezar, ni la edad, ni las circunstancias. Solo necesitas querer hacerlo. Y hablando de su Keller, le dije: «Ya sé de qué voy a escribir mañana». O sea, hoy.

Así que, si tienes una boda, una primera comunión, o cualquier momento especial, visita su página: https://aurora-zuckermandeln.at. No solo encontrarás almendras, también te llevarás algo valioso en el corazón, además de las almendras en la mano.

Gracias, Aurora.

 

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